La asociación de la Bendición de Animales de San Antonio Abad de Puçol, formada por un grupo de aficionados al mundo del caballo, lleva una década trabajando por mantener la tradición. La cita fue en la plaza Joan de Ribera, frente a la puerta de la iglesia de los Santos Juanes donde el 17 de febrero a las 12 del mediodía se celebró la bendición de animales de San Antonio Abad.
Ante la posibilidad de que la fiesta se perdiese, fueron siete aficionados los encargados de la organización. La Federación Valenciana sirvió de apoyo y se coordinó la fecha con otros pueblos para que los dueños de los caballos puedan participar también en Puçol.
Este año las bendiciones en los 19 pueblos de la Federación se realizan del 13 de enero al 24 de febrero. La bendición de animales mantiene el mismo ritual que se conoce desde el siglo pasado: se realiza un domingo a las 12 del mediodía, después de una misa en la parroquia de los Santos Juanes y tras sacar la imagen de San Antonio Abad a la plaza, primero desfilan las mascotas, sobre todo perros y gatos, aunque cada vez hay más animales distintos y al final los caballos.
Cada año reparten en torno a 600 bolsas con detalles para todos los participantes, que incluyen la estampa del santo, el maíz, la algarroba y el panecillo tradicional. Además, un detalle especial para los que desfilan con los caballos, más cuidado este año, al celebrar la asociación de la Bendición de Animales de San Antonio Abad de Puçol su décimo aniversario. Se espera que las nuevas generaciones se impliquen y participen en la organización para que esta costumbre siga viva y sirva para disfrute de los vecinos.