Aurelio González, secretario general de la UPA Castilla y León, participó en las últimas horas en la reunión mantenida con representación de políticos funcionarios de Medio Ambiente de la Comisión Europea y con los responsables del Parlamento Europeo en Bruselas a la hora de presentar la realidad del lobo en la Comunidad.
La jornada de trabajo consistió en la información a las autoridades europeas en primera persona sobre la situación en la que se encontraron los ganaderos de extensivo de dicha comunidad autónoma debido a la expansión descontrolada de lobos en la mayoría del territorio regional.
Los ataques del lobo causan daños a nivel económico
Aurelio González expuso en su intervención el gravísimo perjuicio y los daños económicos que llegan a sufrir los ganaderos de los ataques que frecuentemente sufren en las explotaciones.
Así es como se ha trasladado la realidad que vive el lobo en Castilla y León, en la que se llegan a producir siete “lobadas” diarias, generando en el último año más de 3.000 muertes y que ha supuesto un aumento de incidencias del 30% respecto al año pasado.
La UPA ha querido recordar que las medidas que en estos momentos se implementa, caso de los mastines o los vallados cara a futuro, cuentan con poca efectividad por las peculiares características a la hora de manejar la cabaña ganadera en zonas amplias de la región. Eso sí, deben considerarse las indemnizaciones por muerte que son escasos y donde no se llegan a recoger todos los daños por lucro cesante.
Igualmente, lo que han hecho es informar a la Comisión Europea y al Parlamento Europeo sobre las consecuencias que, a nivel de ciudadanía tiene la proliferación de especies salvajes como los ciervos o jabalíes.
Como ejemplo, en Castilla y León en 2014 llegaron a producirse 4000 accidentes de tráfico provocados por la fauna, incrementándose hasta 8.000. Se han expuesto los daños directos que provocan en la agricultura, destrozando los cultivos y en la ganadería, produciéndose la transmisión de enfermedades contagiosas.
“Llevamos años luchando y sacrificando vacas para tener una cabaña ganadera saneada y casi libre de tuberculosis y brucelosis bovina, y todos estos avances se ponen en riesgo cada vez más debido a la expansión descontrolada de jabalíes o ciervos compartiendo pastos, y comprobado ya que son en algunos casos portadores de estas enfermedades”, apuntó Aurelio González.
UPA Castilla y Léon ha querido dejar clara la realidad existente sobre el lobo y la ganadería, alertando a Bruselas sobre el tema y recordando que “si no se toman medidas reales y efectivas para controlar la fauna salvaje se estará fomentando el despoblamiento, puesto que junto a los bajos precios que se perciben por los productos agrícolas y ganaderos, y la falta de empleo femenino, son las principales causas para que se esté presionando a los agricultores y ganaderos a abandonar la actividad agraria”.
“La fauna sin control hace que hoy ya en mi tierra, Castilla y León, la especie en peligro de extinción sea la humana, puesto que en amplias zonas rurales ya nacen más lobos que niños”, mantuvo Aurelio González.