El conjunto del sector olivarero español, representado en unidad de acción por ASAJA, COAG y UPA, convoca una gran manifestación el 10 de octubre en Madrid para denunciar la crítica situación que atraviesan más de 250.000 familias de productores por las pérdidas que soportan ante los bajos precios del aceite de oliva en origen.
A pesar de que España es el principal productor de aceite de oliva a nivel mundial, cuenta con los precios en origen más bajos de toda la Unión Europea, llegando incluso a situarse por debajo de los costes de producción. Según datos del Observatorio de Precios y Mercados de la Consejería de Agricultura de Andalucía, la campaña se inició en 2018 con un 26% de caída de precios (a una media de 3,53 €/kg) y ha continuado su tendencia bajista durante 2019, hasta situarse en un -44%(una media de 1,99 €/kg en la primera semana de junio).
Según los responsables sectoriales de UPA, COAG y ASAJA, esta situación de precios «no obedece a razones de mercado, ya que se trata de un sector en el que la demanda crece por encima de la oferta, sino a maniobras especulativas que buscan ganar cuota hundiendo los precios en origen».
Por otro lado, los convocantes también denuncian que «la falta de medios materiales y humanos impide llevar a cabo los controles necesarios en materia de trazabilidad, que permitan garantizar la calidad y la pureza, impidan prácticas fraudulentas relacionadas con las mezclas de aceite y certifiquen que el etiquetado ofrece una información completa y rigurosa.
A todo ello se suman las prácticas comerciales desleales de las cadenas de distribución que utilizan el aceite de oliva como producto reclamo, tirando por tierra la imagen de un producto de excelencia y contribuyendo a la tendencia a la baja de los precios».
A esto se suma la sequía, la incertidumbre del Brexit y la futura imposición, anunciada por el Gobierno de Estados Unidos, de aranceles del 25% al aceite de oliva. Si bien la lista provisional de productos agroalimentarios a los que se les pueden aplicar los aranceles se circunscribe al aceite de oliva envasado de menos de 18 kilos, el aceite a granel, del que EEUU es el tercer mercado internacional después de España e Italia, también puede resultar perjudicado.
En 2018, EEUU importó aproximadamente 120.000 toneladas de aceite de oliva procedentes de España, por valor de unos 425 millones de euros para el aceite español.
Tal y como recuerdan los convocantes, el sector del olivar tiene una gran importancia en España desde el punto de vista económico, social y medioambiental. La superficie de cultivo dedicada al olivar es de 2,6 millones de hectáreas, distribuidas en más de 400.000 explotaciones, que proporcionan 15.000 empleos en la industria y generan más de 50 millones de jornales por campaña. A esto se suma que representa la única alternativa de cultivo y de ingresos en gran cantidad de municipios españoles, cumpliendo así una función clave de fijación de población en el medio rural y de protección del medio ambiente.