Las asociaciones ecologistas más relevantes de Extremadura (Ecologistas en Acción de Extremadura, Amus, Adenex, Ecologistas Extremadura, Dema, Sociedad Extremeña de Zoología, Grus, Anser) han acordado, en una reunión mantenida en Almendralejo con motivo del Día Internacional de la Educación Ambiental, solicitar al Gobierno español y a las Administraciones competentes que no se prorrogue la actual licencia de explotación de la central nuclear de Almaraz que termina en 2020 por considerar que podría ser una «imprudencia» superar su vida útil de 40 años que se cumplen en 2021 para la unidad I y en 2023, para la unidad II.
Tras el debate social generado en muchos sectores de la sociedad extremeña sobre la conveniencia de permitir que sigan en funcionamiento los dos reactores nucleares de la central nuclear de Almaraz, y ante las aparentes dudas de las empresas eléctricas, las asociaciones afirman entender las diferentes posturas, entre las que se encuentra la necesidad de mantener el puesto de trabajo, pero alertan sobre el riesgo real de que se produzca un accidente debido al deterioro de los elementos de esta explotación nuclear, una de las más grandes del Estado, que casi ha cubierto su vida útil y ya ha sufrido numerosas incidencias de distinta consideración en el pasado. Por ello, insisten en su solicitud de no alargar las licencias de explotación puesto que existen alternativas energéticas que no presentan los riesgos de la energía nuclear, como pusieron en evidencia los devastadores accidentes de Chernóbil o Fukushima.
Las ONG ambientales consideran que es necesario que los partidos políticos y otras entidades ciudadanas respeten las normas legales y apoyen la transición en el modelo de desarrollo de esta comarca y de toda la provincia, dirigido a otros modelos de desarrollo más sostenibles como el turismo responsable, las energías sostenibles y a las producciones agrícolas, ganaderas e industriales de calidad, respetuosas con la conservación del medioambiente y la sostenibilidad, también social y económica. Un apoyo que no solo beneficiaría a la generación actual, sino también a las generaciones futuras que tendrán que hacerse cargo de unos residuos nucleares cuyo mantenimiento controlado deberá prolongarse durante miles de años.
Asimismo, animan a los ciudadanos a informarse sobre la posibilidad de producir su propia energía y sobre sus beneficios para sí mismos y el medio ambiente; y a las Administraciones Públicas a seguir impulsando la necesaria transición a energías 100% renovables, especialmente la generación de energía solar, apostando no solo por su instalación, sino también por el fomento de la fabricación de componentes, piezas, recambios y mantenimiento de estas plantas solares, con transferencia tecnológica real a la región extremeña.
Fuente-Ecologistas en Acción