Castilla-La Mancha apuesta por el uso de la biomasa forestal como fuente de energía sostenible
Con el desarrollo de la Estrategia Regional de la Biomasa Forestal de Castilla-La Mancha, el Gobierno Regional quiere impulsar el sector primario asociado al aprovechamiento con usos energéticos de la biomasa de nuestros montes, desarrollando una cadena de valor basada en la gestión sostenible de los bosques asociada a la creación de empleo en las zonas rurales y al mismo tiempo, con su consumo con fines energéticos, contribuir a la mitigación de los efectos del Cambio Climático en sustitución de los combustibles fósiles.
Durante la inauguración del Congreso Nacional de Bioenergía 2018 organizado por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en colaboración con la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (AVEBIOM), y cuyo objetivo principal era abordar el proceso de tramitación oficial de las redes de calor con biomasa facilitando información inicial a los promotores de este tipo de instalaciones, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, explicó a los más de un centenar de técnicos y responsables de las administraciones públicas asistentes, las acciones desarrolladas en esta materia y las que se van a ejecutar a corto plazo por el Gobierno regional.
Martínez Arroyo señaló algunas acciones concretas enmarcadas en esta estrategia, como la sustitución de las calderas de gasoil por astilla en dos oficinas comarcales agrarias, las de Jadraque y Collogudo en Guadalajara, mencionando que esta acción también se trasladará a la dirección provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural en Cuenca. «Porque se trata de disponer de biomasa próxima al lugar donde se va a utilizar como combustible para reducir la contaminación que se traduce del transporte», explicó el consejero.
A este esfuerzo en materia medioambiental se le sumará el del cambio de calderas fósiles por biomasa en 47 institutos de Educación Secundaria de la región, lo que permitirá ahorrar al año 3.000 toneladas de gases de efecto invernadero equivalentes de CO2 que dejarán de emitirse a la atmósfera en ese periodo de tiempo, un proyecto ambicioso que dará continuación al iniciado en los centros de Infantil y Primaria.
La agricultura como fuente de energía y riqueza
No obstante, Martínez Arroyo matizó que no solo se trata de apostar por la biomasa forestal, sino también por las grandes posibilidades que existen en el ámbito de la agricultura, especialmente en una región en la cual el 45 por ciento es masa forestal y donde existe la mayor superficie de cultivos leñosos de España, lo que permite la utilización de sus restos durante cualquier época del año.
Se calcula que este año Castilla La-Mancha ha perdido 10.000 personas, por lo que el despoblamiento es uno de los mayores retos a los que se enfrenta la región, por ello, el consejero ha abogado por un cambio de mentalidad para que la propia agricultura se vea como una fuente de energía y riqueza que puede contribuir, además de a reducir emisiones de CO2, a que la gente se quede a vivir en los pueblos.
Proyecto Clima: 150.000 euros adicionales
El consejero también se refirió a la adhesión del Gobierno regional al Programa Clima, por el cual recibe recursos europeos por cada tonelada de CO2 y gases de efecto invernadero equivalentes que se ahorran, celebrando que se prevé que se ingresen en Castilla-La Mancha 150.000 euros adicionales al presupuesto público este año gracias al esfuerzo del Gobierno regional por reducir la emisión de gases de efecto invernadero.