Hoy se ha celebrado, en el Salón de Actos de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de Albacete, el Seminario de Especialización «Economía, empresa y emprendimiento social» organizado por Inmaculada Carrasco Monteagudo, Gregorio López Sanz y Fabio Monsalve de dicha Facultad y Juan Pedro Molina Lozano y Pedro Gómez Mora de la Asociación de Docentes de Economía de Secundaria en Castilla-La Mancha (ADES-Castilla-La Mancha). Ante estudiantes universitarios de grado y postgrado, profesores de Enseñanza Secundaria y representantes de movimientos sociales y ONG, entre otros asistentes, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha impartido la ponencia «Medio ambiente, motor de economía rural».
En la rueda de prensa celebrada con anterioridad a su intervención, Martínez Arroyo ha comunicado a los medios de comunicación que, próximamente, el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha tomará en consideración el anteproyecto de Ley de Economía Circular, un paso más, tras pasar el texto por el Consejo Consultivo, antes de su tramitación a las Cortes de Castilla-La Mancha. Con esta normativa, que contribuirá al cambio de modelo lineal por uno circular, se prevé la creación de 30.000 puestos de trabajo vinculados a la economía «verde».
La importancia del medio rural
Durante su ponencia, el consejero ha destacado que los pueblos de Castilla-La Mancha son motor de desarrollo. De hecho, la agricultura, la ganadería y las industrias agroalimentarias representan dentro del Producto Interior Bruto de la región un 15 por ciento, lo que significa que «15 euros de cada cien que se generan cada día en Castilla-La Mancha provienen de la actividad de la industria agroalimentaria».
Además, esta industria se ubica en el medio rural, donde se transforma el producto de los agricultores y ganaderos lo que implica que el valor añadido generado se quede en los propios pueblos. Por ello, Martínez Arroyo ha declarado que es necesario «seducir a los ciudadanos de las ciudades» sobre la importancia que tiene el medio rural, no solo desde el punto de vista agroalimentario, sino como motor de desarrollo. Para ello, ha dicho, hay que convencerles de que es preciso que se siga invirtiendo parte de sus impuestos en dotar al medio rural de servicios tan necesarios como infraestructuras, sanidad, o colegios; y esto hay que hacerlo desde un enfoque de modelo territorial.
«La innovación se palpa cada día en el sector agrario», ha recordado el consejero, por lo que ha pedido «no mimetizar» la palabra agricultura con el medio rural, como se ha hecho hasta este momento, incluso de forma negativa.
Necesidad de agua para el desarrollo económico
Otro de los asuntos tratados durante su ponencia ha sido el despoblamiento, que es, para Martínez Arroyo, una «cuestión prioritaria» y el «reto» más importante del país en estos momentos; y ha pedido que se busque entre todos la fórmula para «revertir» la situación actual, porque todavía se está a tiempo.
Entre las causas de despoblamiento en Castilla-La Mancha y, concretamente, en la provincia de Guadalajara, el consejero ha mencionado el agua «que pasa y no se para», cuando es «imprescindible» para el desarrollo económico. Por ello, ha matizado, desde el Gobierno regional y el propio sector se ha promovido un uso eficiente de este recurso, con medidas como la aprobación de 17 proyectos de mejora con el objetivo de garantizar el acceso al mismo.
El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural ha estado acompañado por la decana de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, Carmen Córcoles; la vicerrectora de Transferencia e Innovación, Ángela Moreno; el profesor Gregorio López; el director provincial, Manuel Miranda; así como por la presentadora de la conferencia, María Andrés, de Ganaderas en Red.