El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de Cantabria, Guillermo Blanco, ha anunciado hoy la puesta en marcha del Plan Estratégico Ambiental Saja-Besaya 20-30, cuyo objetivo es la realización de un conjunto de actuaciones que orienten la gestión ambiental de ambas cuencas hacia un desarrollo sostenible.
En una reunión de trabajo celebrada en las instalaciones del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), a la que asistieron los alcaldes de los diez municipios afectados, los directores generales de las tres consejerías implicadas en el Plan (Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Industria y Obras Públicas) y el director de estudios del Instituto de Hidráulica Ambiental de Cantabria (IH), Guillermo Blanco ha desarrollado las líneas generales del plan que constará de varias fases.
La primera consiste en realizar un diagnóstico de la situación actual de ambas cuencas a partir de toda la información ambiental disponible sobre asuntos como la calidad de las aguas y del aire, la conservación del paisaje, los suelos contaminados, los residuos industriales, domésticos y agro ganaderos y las áreas degradas.
Será el IH, en colaboración con el Gobierno y los diez municipios que integran la Agrupación de Municipios del Saja-Besaya (Cartes, Miengo, Suances, Polanco, Santillana del Mar, Reocín, Alfoz de Lloredo, Corrales de Buelna, San Felices de Buelna y Torrelavega), quien lleve a cabo este inventario de manera inmediata.
Para la elaboración del mismo, el consejero pedirá la colaboración del Ministerio de Transición Ecológica, del resto de municipios que atraviesan las cuencas de ambos ríos (Ruente, Cabuérniga, Los Tojos, Cabezón de la Sal, Mazcuerras, Campoo de Enmedio, Santiurde de Reinosa, Pesquera, Bárcena de Pie de Concha, Molledo, Arenas de Iguña y Cieza) y de organizaciones conservacionistas, ecologistas, sindicatos y empresas del Saja-Besaya.
Tras la primera fase, que concluirá en 2020, se iniciará una segunda consistente en poner en marcha una primera etapa de actuaciones, que incluirá una evaluación al final del periodo 2021-2025, y una tercera y última etapa, entre 2026-2030, con más actuaciones y otra evaluación.
«Buscamos soluciones de consenso. Es muy importante tener conciencia de que lo que le ocurre a un municipio lo debemos solucionar entre todos» ha matizado Blanco, quien ha mostrado su convencimiento de que el Plan Estratégico Ambiental Saja-Besaya 20-30 aportará soluciones a los problemas existentes y ayudará a cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) marca hasta 2030. En este sentido, se ha mostrado confiado en lograr estos retos al poder contar en este proyecto con el apoyo técnico del IH, al que considerado «un pilar fundamental» para lograr soluciones de consenso.
En este sentido, el Director de docencia y capacitación y responsable del área de hidrobiología y gestión ambiental de IHCantabria, José Juanes, ha explicado que los trabajos que va a desarrollar el instituto pasan por «consensuar, planificar, diagnosticar, priorizar, poner en marcha diferentes actuaciones y luego evaluar los resultados.» y ha recordado que este tipo de estudios no son nuevos para IHCantabria porque anteriormente ya ha trabajado en colaboración con el Gobierno cántabro para poner en marcha estrategias de gran éxito como la directiva del Marco del Agua, Hábitat o estudios sobre recursos marisqueros.