El candidato de IU a la Presidencia de Cantabria, Israel Ruiz Salmón, ha informado hoy que su partido impulsará una Ley de Alimentación, Producción y Consumo Sostenible cuyos principales objetivos son fomentar las cooperativas de productores, acabar con el despilfarro alimentario y etiquetar los productos en braille.
Durante la rueda de prensa en la que explicó las líneas generales de esta ley, Ruiz Salmón afirmó que es «necesaria para la Comunidad» porque «dará respuesta» a los sectores productivos y al ámbito familiar y local ligados a la alimentación.
El cabeza de lista de IU para Cantabria también ha resaltado la importancia de las cooperativas agrícolas, ganaderas o pesqueras como «instrumento de democratización» en las relaciones laborales, y de los pequeños productores y trabajadores como «sujetos activos en la dinamización de nuestra economía».
El sector de la industria agroalimentaria de Cantabria representa en la actualidad en torno al 5% del Producto Interior Bruto (PIB) autonómico y emplea a más de 6.000 personas, por lo que, según Ruiz Salmón, debería recibir un impulso «por su alto valor añadido» y ser reforzado para que todos los eslabones de la cadena producción se realicen dentro de Cantabria, contribuyendo a que esta «sea quien lleve las riendas de su propia economía».
La Ley de Alimentación, Producción y Consumo Sostenible permitirá, a opinión de Ruiz Salmón, profundizar en el «Kilómetro Cero», es decir, la producción y consumo de productos locales con el fin de aumentar la calidad de los alimentos y reducir los costes económicos y las emisiones contaminantes. Para conseguir este objetivo, además de apostar por el cooperativismo, es necesario crear un mercado laboral descentralizado que refuerce las ferias y eventos gastronómicos de las comarcas y los pueblos cántabros.
Otros de los objetivos de la ley son impulsar más sellos de calidad para los productos agroalimentarios, incluir el etiquetado en braille de los productos alimenticios, reducir los residuos dentro del sector y la formación en buenas prácticas de producción y consumo, tanto en hogares como en centros de trabajo o la Administración Pública. Por ello, pretende abordar los descartes en la pesca, la minimización de plásticos o el reciclado a través de sistemas de depósito en supermercados, en colaboración con los distintos agentes implicados y dentro de las competencias propias de la Comunidad Autónoma.