No estamos celebrando el 15 de octubre, de hecho, quedan muchos meses para ese día, pero todos los días del año son una magnífica oportunidad para la reflexión y sensibilización sobre temas que son importantes para la sociedad y que no deben caer en el olvido. Hay que reivindicar siempre el importante papel de la mujer rural en nuestro planeta.
En la actualidad, tenemos una serie de estadísticas y datos que hacen posible la medida de una serie de variables que nos proporcionan una visión objetiva de la situación económica, política y social de nuestra sociedad en general y del medio rural en particular. Esto hace que podamos conocer actualmente el número de empleados y desempleados, así como dónde residen o cuántas personas estarán afiliadas a la seguridad social.
Una serie de datos que nos dicen que las mujeres son las encargadas de crear el 54% del empleo autónomo en las zonas rurales. Estos son unos con los que hace no muchos años no se contaban.
No nos equivoquemos, las mujeres rurales llevan trabajando toda su vida desde que el principio de los tiempos. Hablamos de un trabajo que ha sido muchos años silenciado e invisible, pero que igualmente no era valorado y tampoco remunerado de ninguna forma.
La mujer en el medio rural es vital
Desde asociaciones como AFAMMER, se ha querido poner en primera línea la capacidad para el liderazgo y el emprendimiento de la mujer rural. Ayudan a que con la muestra del trabajo que se realiza, ello valga para reivindicar la importancia que tiene en el desarrollo económico y social de los municipios que habitan y como ejemplo de las mujeres, las cuales no son realmente conscientes del inmenso poder que pueden llegar a tener.
La Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural, saben que los pueblos sin mujeres no tienen futuro, por lo que llevan ayudando desde sus comienzos al fomento de la inserción en el mercado laboral y apoyando a su actividad emprendedora.
Respecto a esto, las Nuevas Tecnologías cuentan con un importante papel, permitiendo que las mujeres puedan tener acceso a cursos formativos o de conexiones con mercados a los que antiguamente no era imposible tener acceso.
Estas tecnologías son las que permiten gestionar más fácilmente las explotaciones agrícolas y ganaderas, dando a conocer los productos y conectándose a otros mercados.
Hace ya más de dos décadas que una serie de asociaciones y ONG lograron que el 15 de octubre fuera considerado como el Día Internacional de la Mujer Rural en la IV Conferencia de Mujeres de Pekín.
En 2019 puede verse que las mujeres rurales, de forma valiente, están logrando romper una serie de estereotipos de género ocupando puestos de trabajo que tradicionalmente se asociaban al género masculino.
A pesar de esto, siguen existiendo diferencias de género, algo que se hace evidente al mirar los puestos directivos en las empresas agrícolas y en las explotaciones agrarias y ganaderas. Todo esto hace que haya que seguir impulsando desde el sector público y privado la figura de la Titularidad Compartida y reivindicar un protagonismo de la mujer rural a la hora de abordar la Política Agraria Comunitaria. Las mujeres rurales no solo no deben ser ignoradas, son las que, en realidad, mueven el mundo.