El Islam es la segunda religión con más creyentes entre los jóvenes en Cataluña, muchos de los cuales han nacido en dicha Comunidad. Por este motivo, la Generalitat ha decidido regularizar el rito musulmán Aid el Adhar o del sacrificio del cordero, que se celebra en agosto, 70 días después del Ramadán.
Se estima que más de medio millón de personas celebran este rito en Cataluña. En los países árabes, las familias matan a los corderos en sus propias casas, algo no permitido por la legislación española. Por ello, según declaraciones del coordinador de la Unió de Comunitats Islàmiques a Catalunya, Mohamed Ghaidouni, al medio ElPeriódico, «Estamos obligados a comprar el cordero clandestinamente, la gente va al monte, al río o a granjas y hace el sacrificio en condiciones sanitarias no controladas. No podemos obligar a los mataderos a hacerlo como dicta la tradición». De hecho, según Agricultura, en el 2017, media docena de particulares y granjas fueron sancionados por sacrificar corderos fuera de los mataderos.
La Federació d’Entitats Catalanes de Ramaders d’Oví i Cabrum calcula que el 90 por ciento del cordero que se vende en agosto incumple las garantías legales y sanitarias. Su regulación no solo acabaría con este problema, también supondría la salvación del sector ahora que el consumo de esta especie ha caído a mínimos históricos.
Dos alternativas para la regulación del Aid el Adhar
Las consejerías de Agricultura, Justicia y Salud de la Generalitat de Cataluña están analizando cómo legalizar este rito, siempre y cuando los musulmanes catalanes compren la carne a los ganaderos locales. La Consejería de Agricultura considera que sería suficiente con habilitar 72 mataderos ya existentes en Cataluña. Una parte de los mismos son equipamientos municipales con muy poco uso y otros pertenecen a empresas que ya trabajan con el método halal.
El Reglamento CE 1099/2009, relativo a la protección de los animales en el momento de la matanza, obliga al aturdimiento previo a la muerte de todos los animales, o a su sacrificio en mataderos si va a realizarse por el rito halal. Según un informe sobre este tipo de sacrificio, que analiza la legislación y la opinión de veterinarios, realizado por Alfonso Senovilla, veterinario experto: «El rito halal consiste en dar muerte al animal sin aturdimiento previo, mediante degüello, cortando las venas yugulares, las arterias carótidas, la tráquea y el esófago. El animal es plenamente consciente durante este proceso; de hecho algunos estudios revelan que el inicio de la pérdida de la consciencia durante el sacrificio sin aturdimiento en ovinos podría aparecer a los 72 segundos después del degollado, no alcanzando un estado de inconsciencia profunda hasta los 220 segundos».
No obstante, si se habilitaran mataderos en Cataluña, se tendría que aturdir al animal con descargas eléctricas antes de acuchillarlo, «la mejor opción teniendo en cuenta el bienestar animal y aplicando las directrices europeas», según declaraciones de la directora general de Agricultura y Ganadería, Elisenda Guillaumes, al mismo medio informativo, aunque teme que la interpretación más purista del Islam no lo admita.
En ese caso, los ganaderos plantean una alternativa que se aplica en Francia desde hace años: usar módulos prefabricados y movibles como mataderos, con todos los requisitos sanitarios, especialmente para cubrir la demanda en las zonas más pobladas del área metropolitana de Barcelona. En las próximas semanas está prevista una visita a Francia para comprobar estas infraestructuras, aunque la Agencia de Salud Pública mantiene ciertas reticencias a esta fórmula.