La mixomatosis es una enfermedad infecciosa de origen vírico que afecta a los conejos. El agente causal es el Myxoma virus, del género Leporipoxvirus (en la familia Poxviridae). Se caracteriza por tumefacciones en la piel y en las membranas mucosas, particularmente en cabeza y genitales. Después suele evolucionar a conjuntivitis aguda y a veces ceguera. El conejo se vuelve apático, pierde el apetito y desarrolla fiebre. Si el animal no tiene resistencia, muere en aproximadamente trece días.
En julio de 2018, se detectaron por primera vez en España casos de mixomatosis en liebres ibéricas (Lepus granatensis), en concreto, en la provincia de Córdoba. Un informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, publicado el 23 de octubre, explicaba que el brote se había extendido por la Península Ibérica, «estando afectadas en la actualidad comarcas de 12 provincias de las Comunidades Autónomas de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Murcia».
El Ministerio comunicó este hecho a los organismos internacionales de salud animal y estableció un protocolo para trabajar en coordinación con las Comunidades Autónomas con el objetivo de frenar la expansión de la mixomatosis. Además, ordenó el cese de las autorizaciones de translocaciones (traslados) de conejos y liebres silvestres procedentes de las áreas afectadas; y redactó una serie de recomendaciones preventivas a guardas forestales, ganaderos, cazadores y otros sectores que realizan actividades en el medio natural.
Asimismo, explicó que «actualmente se está estudiando el desarrollo de un proyecto de colaboración entre distintos agentes, tanto públicos (CReSA, Universidad de Oviedo, Algete) como privados (LABIANA), con el apoyo del MAPA, con el triple objetivo de conseguir la secuenciación completa del virus, estudios de patogenia por inoculaciones in vivo y estudios de eficacia de las vacunas actuales frente a la nueva cepa, tanto en liebres como en conejos».
Mixomatosis en Castilla-La Mancha
En el caso concreto de Castilla-La Mancha, el brote se detectó el mes de agosto en los municipios de Mota de Cuervo (Cuenca), Pedro Muñoz y Socuéllamos (Ciudad Real). Desde ese momento, la Dirección General de Política Forestal y Espacios puso en marcha, como medida preventiva, las actuaciones contempladas en el Plan de Vigilancia Sanitaria de Fauna Silvestre. Según el informe emitido al respecto por el Gobierno Regional, aunque esta situación no es muy habitual «no debe llevar a ninguna situación de alarma», porque «en ningún caso causa problemas para la salud pública ni existe posibilidad de transmisión al ser humano, al no ser una zoonosis», es decir, una enfermedad que se transmite a las personas.
No obstante, el Gobierno Regional recomendó mantenerse alerta y seguir un protocolo en el caso de detectar liebres con síntomas de padecer mixomatosis. Las principales recomendaciones de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural a este respecto son no manipular ejemplares enfermos o cadáveres encontrados en el terreno y avisar lo antes posible al Servicio Veterinario Oficial de las Oficina Comarcal Agraria correspondiente, o a los agentes medioambientales de la zona, que adoptarán las medidas adecuadas para la oportuna investigación epidemiológica. En caso de no obtener respuesta inmediata, se recomienda enterrar los cadáveres en cal viva, manipulándolos siempre con guantes. Asimismo, aconsejó cazar únicamente la liebre en la modalidad de caza con galgo, o no cazarla en caso de grandes mortandades.