Un informe realizado por The Nielsen Company para la Junta de Andalucía, en el que se estudiaron los hábitos de consumo de más de mil personas de entre 20 y 70 años de ambos sexos que respondieron a una encuesta online, refleja que los andaluces tienen hábitos alimenticios más saludables que el resto de los españoles.
En concreto, el estudio reveló que el 37% de los andaluces se considera «consumidor saludable» frente a la media del 33% del resto de España. Es decir, aquel que consume varias veces a la semana algunos de los alimentos incluidos en tres de las diez categorías seleccionadas por los encuestadores: yogures de soja, bífidus y para el control del colesterol; productos sin lactosa; leches vegetales; pan integral, sin sal o ecológico; galletas, tortitas o cereales bajos en grasa y azúcares o altos en fibra; pastas con fibras o integrales; arroz integral; jamón cocido, pechuga de pavo o pollo 0% materia grasa o bajo en sal; atún bajo en sal; y bebidas y zumos 0% azúcares.
El principal motivo por el que los andaluces se decantan por alimentos saludables es «Estar sano y en forma como prioridad de vida» con el 90 % de los resultados, frente al 76 % del año 2017. Curioso, si tenemos en cuenta que, atendiendo a la edad, los mayores porcentajes se observan en los adultos andaluces de 20-29 años (23%) y la menor incidencia entre las personas de 60 a 70 años (15%).
Atendiendo a las diferentes dietas, en Andalucía predominan los consumidores de todo tipo de alimentos (52 %) seguidos por quienes se preocupan por cuidar la línea (44 %), porcentajes muy alejados de los vegetarianos (3%) y los veganos (2%).
Entre los alimentos que más consumen, destacan los de alto contenido en vitaminas y minerales (59 % en Andalucía frente al 55 % del resto de España) seguidos de los reducidos en sal (57 % y 53 % respectivamente).
Los andaluces también apuestan por los productos cárnicos con bajo índice de grasa y sal; en concreto, el porcentaje de los que compran jamón cocido reducido en sal y 0 % grasa asciende al 43 % (33 % resto de España) y el de quienes adquieren pavo reducido en sal y 0 % grasa al 40% asciende al 32 % (inferior, en este caso, al 33 %del resto del país).