La mixomatosis, llamada vulgarmente tomatosis, es una enfermedad infecciosa de origen vírico que afecta a los conejos. El agente causal es el Myxoma virus, del género Leporipoxvirus (en la familia Poxviridae). Se caracteriza por tumefacciones en la piel y en las membranas mucosas, particularmente en cabeza y genitales. Después suele evolucionar a conjuntivitis aguda y a veces ceguera. El conejo se vuelve apático, pierde el apetito y desarrolla fiebre. Si el animal no tiene resistencia, muere en aproximadamente trece días.
Esta enfermedad animal, que no afecta al ser humano, fue detectada por primera vez en España en 1953; desde entonces ha sido uno de los problemas veterinarios más importantes para el sector de la cunicultura (cría de conejos domésticos) y para los conejos silvestres; así como a animales que se alimentan de ellos como el lince ibérico.
La aparición de una vacuna específica y las campañas de control veterinario han mantenido relativamente controlados los brotes epidémicos de mixomatosis en conejos, pero el 20 de julio se detectaron por primera vez en España, concretamente en la provincia de Córdoba, casos de mixomatosis en liebres ibéricas (Lepus granatensis), tal y como detalla un informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, publicado el 23 de octubre.
En él se explica que el brote se ha extendido por la Península Ibérica, «estando afectadas en la actualidad comarcas de 12 provincias de las Comunidades Autónomas de Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Murcia».
El Ministerio notifica que el Laboratorio Central de Veterinaria (LCV Algete) «ha recibido hasta la fecha (23 de octubre) un total de 142 muestras de liebres en las que se ha confirmado la enfermedad» y reconoce que es muy difícil determinar la extensión del brote y las tasas de mortalidad de liebres, siendo necesario esperar al comienzo de la temporada de caza para calcular la incidencia.
Actuaciones para frenar el brote
El Ministerio comunicó el brote a los organismos internacionales de salud animal y estableció un protocolo para trabajar en coordinación con las Comunidades Autónomas con el objetivo de frenar la expansión de la mixomatosis. Además, ordenó el cese de las autorizaciones de translocaciones (traslados) de conejos y liebres silvestres procedentes de las áreas afectadas; y redactó una serie de recomendaciones preventivas a guardas forestales, ganaderos, cazadores y otros sectores que realizan actividades en el medio natural, entre las que destaca que, en caso de encontrar un ejemplar con síntomas de esta enfermedad, no debe manipularse sino avisar lo antes posible a las autoridades para que procedan a la recogida de muestras.
Asimismo, el Ministerio explicó que «actualmente se está estudiando el desarrollo de un proyecto de colaboración entre distintos agentes, tanto públicos (CReSA, Universidad de Oviedo, Algete) como privados (LABIANA), con el apoyo del MAPA, con el triple objetivo de conseguir la secuenciación completa del virus, estudios de patogenia por inoculaciones in vivo y estudios de eficacia de las vacunas actuales frente a la nueva cepa, tanto en liebres como en conejos».